Hasta que el Sol se Apague...

Nunca pensé poner un post con éste título, sino es que alguna vez ya lo hice.

Bienvenidos al post 55, de éste ejercicio mental, de plasmar un poco de las cosas que pasan por mi mente en éstos momentos. Los sueños o pesadillas recurrentes y como los vamos resolviendo.

En éstos días que he estado de incapacidad, he soñado con mi trabajo, con la escuela, con mis amigos, y los que ya no están. Muchas de éstas cosas ahora son fantasmas, que posiblemente se vean representados en una realidad en el futuro. Pero también es probable que no sea así. La vida cambia tan repentinamente que no podemos estar seguros.

Antes de eso, preferí cambiar las cosas. Estando del lado correcto, hoy decidí partír hacía mi nueva vida, rumbo a la segunda mitad de éste año 2008 que no ha sido nada bueno en mi opinión en cuánto a lo que se tenía previsto. Nada ha salido como lo había planeado. Es tan significativo como el que son los últimos minutos del primer día de la segunda mitad.

Ya está prácticamente todo empacado, quedan 3 días. Antes del fin de semana estaré listo. Y bueno sobra decir que no iré solo. Ahi están las listas, las cosas pendientes. Los recuerdos se quedan, no es bueno irlos cargando, al menos no los pesados y que no sirven de nada.

Ya ha pasado un año, y definitivamente me harté de éste lugar. De las cosas que tengo ahora, pues no son nada en comparación a lo que estuve apostando. Es momento de arriesgar por algo más grande. De seguir disfrutando de ésta experiencia que es sentirse vivo.

Son días lluviosos, de esos que implican cambios. Es una buena señal.