We must never be apart...
Caray, siempre situaciones explosivas en mi vida me hacen regresar aquí. El día de ayer no fue la excepción. Nuevamente regresé a mi viejo pueblo, distinto cada día o mes que pasa.
(Mientras me disponía a prepararr una taza de café, acudo a la cocina y me doy cuenta que se rompió mi cafetera, ahhhhh, el universo conspira en contra mía. Estoy crudo y unos amables señores estan cortando el pasto en la parte de afuera, con esas máquinas que hacen un ruido que ahora por mi estado me resulta infernal).
Todo mundo tiene que aprender en algún momento, y pues creo que ya me he pasado de aprender. Este año está apunto de terminar, y como le había dicho a varias de las personas que conozco, estos días con frío, fiestas, y todas esas cosas sacan mucho de uno que a veces no ves en el resto del año.
Ayer me la pasé ebrio, bebiendo solo, absolutamente solo, para luego mal viajarme con la persona que no debía, era como estar dentro de mi pesadilla y ponerme a discutir ahi enfrente, sin saber si tenía un interlocutor o no. Decir todo, para al final sentirme bien pinche vacío. No sé, al final la conclusión es la misma, la pinche decisión es mía y de nadie más. Es mi vida.
Tengo 23 años, creo que 3 más que la primera vez que empece a escribir un blog ya debería de saber tantas cosas.
Lo bueno de ayer: Cumplí mi objetivo, me embriague, y cayó una leve lluvia y un olor a mojado salió de mi ciudad natal, como diciendome que la recuerde, que eran los momentos que tanto disfrutaba en mi eterna soledad. Las mejores cosas pasaban en climas así.
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1 comentario:
aww
toda tu vida aki
todo un juego
toda una paradoja ke pareze no tener fin....bueno realmente no lo tiene, pero eso es lo chido no??
:DDDDDD
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